Vistas de página en total

lunes, 7 de febrero de 2011

3. Bonus Track 1: Los Beatles (v)

Si hay una canción que representa mejor que ninguna otra el aporte de George a los Beatles, esa es Here Comes The Sun. Como una segunda parte/complemento de All Things Must Pass (pese a antecederla por un año). Se acaba el invierno, el sol viene de vuelta, hay que recibirlo. Se acaba un período frío y oscuro. Hay que abrazar el sol y la luz. Iluminarse. En la época más conflictiva y compleja de los Beatles, cuando todo se acababa, George trataba de mantener la esperanza.

Más positivo que eso, imposible. Después de la oscuridad viene la luz. Después de la noche saldrá el sol. Después del frío, el calor. Dado que el mayor problema es recordar eso en el momento más frío y oscuro, esta canción sirve como un perfecto recordatorio.

Una nota triste es que ya se distingue, musicalmente, la separación entre los cuatro. Esta canción es casi puro George. Su guitarra, su voz, su estilo, demostrando que es más que una simple comparsa, y que si está ahí es por algo. La guitarra, si tal cosa es posible, transmite calidez.

Here comes the sun / And I say it’s alright / Little darling / It’s been a long, cold, lonely winter / Little darling/ It feels like years since it’s been here

(Aquí viene el sol / Y digo que está bien / Pequeña querida / Ha sido un invierno largo, frio y solitario / Pequeña querida / Se siente como si hubieran pasado años desde que estuvo aquí)

Esta canción, que ha sido usada en innumerables oportunidades en películas e incluso en comerciales, es prácticamente un sinónimo de esperanza. Quizás sea porque, como decía una antigua publicidad de café –que usaba su melodía- reconforta. Y no sorprende que sea la canción más vendida de los Beatles desde que su catálogo completo fue subido a iTunes, la tienda de música en línea de Apple (el fabricante de computadores, no el sello musical).

Increíble pero cierto. Profundo, pero a la vez popular. Antes, al principio, profesaron una ideología más simple y de música “de consumo”. Y en esa etapa, su mayor éxito fue la que, quizás, es la canción pop más perfecta que jamás haya sonado. Corta (menos de dos minutos y medio), potente, con abundantes “yeah yeah”, y con un ánimo festivo incontrarrestable: She Loves You.

Lejos mejor que los demás hitos pop de los Beatles. Mejor que I Want to Hold Your Hand. Mejor que A Hard Day’s Night. Mejor que Help. Mejor que Twist and Shout. Mejor que cualquier otra canción de la etapa “yeah yeah” de los melenudos. Una introducción rápida y breve en batería, e inmediatamente el estribillo. Rápida y directa. Y todos cantando. Y todos los espacios sonoros utilizados astutamente. Definitivamente George Martin (el productor histórico de los Beatles) sabía lo que hacía.

Esta canción es un ejemplo práctico acerca de cómo escribir una buena canción pop. Además, la temática es completamente atemporal. Casi cincuenta años después, la letra aún es aplicable en forma perfecta. Una historia de amor desencontrado, tan simple y aplicable que Peter Sellers, el comediante británico, alguna vez grabó una versión de esta canción como la conversación de dos tipos en un bar.

Hacia el final, logra bajar un poco la intensidad, para terminar con un yeah que se apaga y estira suavemente en la voz de los cuatro. Absoluta perfección pop.

No hay comentarios:

Publicar un comentario